22/4/10

Dilemas Oniricos

Entonces pase cerca de su casa, un fraccionamiento casi rural, es el destino me decía. Estaba afuera, tan bella, como siempre, es el destino, me repetí.

-Hola-me dijo sorprendida, feliz, esperanzada de verme-¿Cómo te va?
-En términos estadísticos mi vida está a un 80%-dije viéndola como solo yo sé hacerlo, me sentí nostálgico, empecé por desglosar con mi ingenio verbal algunos aspectos recientes de mi vida con un toque de ironía.
-Vaya-suspiro, estaba extasiada.

Hubo una discusión ahí cerca, tonterías le dije, estábamos recargados en su automóvil del año, lo cual no me preocupa en lo mas mínimo, ella sabe que el día que yo necesite un auto de lujo lo tendré, acepta mis principios.

La conversación derivo en generalidades, a cada comentario suyo yo respondía con elocuencia, ella se me acerco, y de algún modo quedamos abrazados, recordamos viejos tiempos, los años pasan y ella no está en su mejor momento, lo hijos le han pesado, el matrimonio, mi lejanía.

-Sabes Angelina, te lo dije, Brad nunca supo apreciarte-apunte.-también sabes que lo nuestro fue pura pasión, solo fuego, la chispa adecuada y también estoy comprometido.
-Lo sé, cariño, lo sé.

De algún modo, como sucede siempre en estas ocasiones, la trama se difumino en una película inexistente, ella estaba encadenada con un atuendo griego, acosada, vilipendiada, querían sacrificarla por un crimen que no cometió, entonces yo, sí, yo, la perfecta combinación de un Al Pacino juvenil y con la personalidad de Anthony Hopkins y el encanto de George Clooney, empecé a descifrar el enigma que envolvía al crimen, con el ingenio de Robert Langdon, incluso mejor que en el código Da Vinci fui de Nerón a Aristóteles, clarísimo como el agua, en el santuario esta la solución, en las espadas de la bóveda principal, ahí está un mazo que señala la respuesta al enigma, para salvar a la mujer que irónicamente muere por mí.
Y como también suele suceder, en esos momentos en que tu identidad se pierde en el subconsciente, escucho a mi admiradora número uno, hablando conmigo, hablando de mí precisamente.

-Sabes algo de Danihell-pronuncia mi nombre con tristeza.
-No últimamente.
-Pues está muy mal, se ha vuelto alcohólico, tiene daño cerebral.
-Lo sé, querida, lo sé.

1 comentario:

Angel dijo...

LO ESCRIBES O LO COPIAS?

DEFINITIVAMENTE ES INTENSO

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